No todo cambia,
hay lugares que siempre
serán tuyos,
paisajes que acaban
en un horizonte,
esperanzas que llegan
tras una sonrisa,
dolores que aguantan
los mismos horrores,
sabores, que cuando los
pruebas,
sí saben a poco,
miedos que se aferran a
una misma arteria,
días que se calcan,
flores que marchitan,
besos que regresan.
El agua es la vida,
el viento es el paso del
tiempo,
la tierra, puede ser tu
escenario.
Menos mal que tú cambias,
menos mal que cambiamos al día.
Menos mal que eres agua,
menos mal que eres
viento,
menos mal...
que pisamos la tierra.
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